







Amigos, les comparto estas imágenes de Juan Rulfo, quién es más conocido por dos grandes obras literarias:
Pedro Páramo y El llano en llamas.Rulfo también fue un maestro de la lente. El Instituto Nacional de Bellas Artes le ha rendido dos homenajes a su obra gráfica. Al último de ellos tuve la oportunidad de asistir. Fue muy grato observar que todas las salas del Palacio de las Bellas Artes albergaban las fotografías de este gran maestro. Puedo afirmar, que junto con la de Josef Koudelka, y algunas de World Press Photo, esa fue una de las exposiciones que más me ha marcado.
Gracias a Rulfo, a Modotti, a Salas Portugal y a Koudelka he comprendido que la fotografía en Blanco y Negro puede traspasar el umbral del registro, del simple documento, para convertirse en una noción cercana al arte.
¡Y por qué titulé esta entrada Tras los pasos de Rulfo? Bien, pues el próximo sábado 27 de octubre pretendemos llevar a cabo un viaje hacia Meztitlán y Real del Monte, dos zonas que fueron registradas por nuestro querido amigo Rulfo. Quien se quiera sumar a esta salida, bien, pues no necesita invitación. Sólo lleve lo necesario para el pasaje y dos o tres rollos en Blanco y Negro (para el caso de los alumnos de séptimo semestre) o dos películas para diapositiva (ISO 200) para los alumnos de octavo semestre y para mis alumnos de segundo semestre de Justo Sierra. Recomiendo la Tri-X 400. También podemos usar la Plus X Pan 125 ASA. En el caso de la diapositiva la Fuji y la Kodak son las mejores.Si desean más información pueden escribir a esta bitácora.
Gracias, y por favor, comenten acerca de la obra de Rulfo.
Por otra parte, para mis alumnos del IESCH les publico en enlace para la próxima lectura cuyo título es
En defensa del fotógrafo Patrick Schneider y las ficciones de un código ético.